Las minicasas en furgonetas se están convirtiendo en la elección de muchas personas para viajar o incluso para vivir. La verdad que a mí me parece una opción muy innovativa y divertida para descubrir el mundo acompañado o solo.
Además, creo que es más cómodo y fácil viajar con una furgoneta que con una autocaravana.
El poder desplazarte a cualquier lugar llevando tu casa contigo es una forma que te permite visitar varios lugares sin la necesidad de buscar hoteles en cada ciudad que quieras ver.
Por otra parte, tiene muchas ventajas, ya que puedes ir disfrutando del camino, observando sus vistas y descubriendo pequeños rincones que no conocías y te encuentras por casualidad. Es una forma de arquitectura portátil y ligera que te acompaña a dónde tú quieras.
Respecto al interior, hay una infinidad de posibilidades para diseñar la furgoneta. Puedes personalizarla a tu gusto y te sorprenderás de la cantidad de cosas que pueden coger dentro, aprovechando al máximo el espacio y, sobre todo, siendo muy ingenioso!
Hay personas que tienen un estilo de vida aventurero y tienen la suerte de poder permitirse vivir en furgonetas, desplazándose dónde les apetezca, visitando lugares nuevos, su arquitectura, su cultura, su gente… Aunque mi idea no sea vivir en un futuro en una furgoneta, me encantaría probar la experiencia de irme unas semanas de viaje con mis amigos y sin rumbo, moviéndonos dónde queramos en cada momento, puesto que despertarse mirando al mar o la montaña tiene que ser una sensación única e inolvidable.
