Las cosas a mi alrededor

Fase 1 – La experiencia del entorno

Me encuentro sentada en un banco de madera situado en un precioso paseo en mi pueblo, Yecla, Murcia. Este último fin de semana he podido analizar y observar hasta el último rincón del lugar que me ha visto crecer a lo largo de los años.

Este lugar está compuesto por varios bancos de madera situados a lo largo de un paseo. Dicho sitio se encuentra completamente rodeado de árboles, en concreto, de moreras. Además, podemos localizar varias fuentes para beber agua y algunas papeleras a lo largo del recorrido.

La superficie está hecha de baldosas en color tierra y con forma rectangular. Podemos diferenciar dos tonos distintos de suelo, unidos por unos pequeños cuadrados de piedra. Al observar el paseo desde la entrada, percibimos que dichas baldosas están conformando algunas formas geométricas como el cuadrado y el triángulo.

Es un lugar perfecto para visitar durante las cuatro estaciones del año, pues las moreras crean unas vistas espectaculares, bien sea en verano con sus hojas verdes o en otoño rojizas.

En resumen, es un lugar tranquilo y agradable donde descansar, pasear, hablar con tus amigos, pasar el tiempo…

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¿Por qué has elegido este lugar?

He decidido realizar el trabajo sobre este paseo porque es un lugar donde he pasado mucho tiempo desde que era pequeña. Por ello, me ha parecido buena idea analizar con otros ojos un sitio conocido y familiar.

¿Qué te hace sentir a gusto?

Es un lugar pacífico, en el cual puedes desconectar y relajarte. Los árboles y los pájaros crean un ambiente cálido y acogedor para pasar el tiempo tanto acompañado como solo. Además, he acumulado muchos recuerdos felices de este sitio, por lo que se ha convertido en uno de los lugares más importantes para mi.

¿Existe algún elemento molesto?

No existe ningún elemento molesto, pues es un lugar sencillo y natural, con un diseño del suelo que no resulta desagradable, y con la vegetación justa para crear un ambiente tranquilo.

¿Crees que te sentirías igual en otro espacio ahora mismo?

No, pues podría encontrar un lugar más espectacular y moderno, pero no con la misma importancia y sensación que tiene este sitio para mi .

¿Piensas que las condiciones de este espacio influyen sobre sus ocupantes? ¿Cómo?

Sí, el entorno que nos rodea siempre nos influye y, en este caso, nos transmite tranquilidad y genera un espacio cómodo y agradable donde puedes desconectar y despejarte.

¿Cambiarías alguna cosa?

No, al modernizarlo cambiaría su esencia.

Fase 2 – Lectura y comprensión de un texto y reflexiones sobre el mismo

Atmósferas – Peter Zumthor

Una vez leído el texto, podemos sentir y ver la arquitectura a través de los ojos de Peter Zumthor. En mi opinión, estoy totalmente de acuerdo con él, puesto que cada edificio, plaza… nos transmite unos sentimientos. Esas sensaciones que tenemos y la «atmósfera» que se crea a nuestro alrededor es parte también de la arquitectura.

A continuación, voy a tratar desde mi punto de vista, los 9 puntos claves que ha mencionado Peter Zumthor que son necesarios para crear la «atmósfera perfecta» de una obra.

• El cuerpo de la arquitectura es el primer punto tratado y me parece muy interesante, pues cada edificio esconde una estructura fascinante detrás de sus paredes que hacen que el exterior que nosotros vemos se mantenga firme y unido.
• La consonancia de los materiales, como bien se ha explicado en el texto, los materiales escogidos son un punto fundamental en el proceso constructivo, pues cada uno aporta unas sensaciones distintas. Por ello, tenemos que elegir los que se ajusten más a la atmósfera que deseamos crear.
• El sonido del espacio, es uno de los apartados que más me ha gustado del autor, ya que concuerdo con él en cada espacio tiene un sonido propio. Por ejemplo, cuando imagino mi campo, me viene el sonido del fuego quemando la madera y las risas de la familia reunida. Sin embargo, cuando pienso en la playa, escucho las olas rompiendo en el mar y la brisa marina cuando estás tumbada en la arena. En resumen, cada lugar tiene unos sonidos asociados que te provocan unos sentimientos.
• La temperatura del espacio es un elemento a tener muy en cuenta, pues una estancia puede hacerte sentir unas sensaciones u otras dependiendo de la temperatura del entorno (más frío o más cálido).
• Las cosas a mi alrededor: como bien describe Peter, debemos pensar en el futuro de los edificios, ajustándonos a las necesidades y funciones que tendrán los espacios que vayamos a crear. Aunque, la persona que habite ese entorno, le dará su toque después, haciéndolo más personal con sus detalles.
• Entre el sosiego y la seducción, un edificio debe transmitir calma y tranquilidad, es decir, sensaciones positivas. Pero, ante todo, debe tener libertad para movernos cómo queramos y con naturalidad.
• La tensión entre interior y exterior, un edifico puede contarnos mucho con su exterior, sin embargo, quizás el interior cuenta totalmente lo contrario. Por ejemplo, podemos ver un edificio con una fachada antigua, recargada de adornos, pero, al adentrarnos nos podemos encontrar con un estilo minimalista y sencillo. Por ello, las apariencias exteriores no tienen que influir en la opinión conjunta de un edificio.
• Grados de intimidad, estoy de acuerdo con el autor en que según el tamaño, la dimensión, la escala, la proporción… de las cosas se generan unas sensaciones u otras. Todos los elementos, hasta los más pequeños, forman parte del ambiente creado.
• La luz sobre las cosas, este punto es uno de mis preferidas, pues la luz para mi es el elemento más importante de un edificio y sobre el que gira un poco la creación de un proyecto. Por supuesto, debemos aprovechar al máximo la luz natural y jugar con ella, sabiendo dónde colocar iluminación y dónde no.

Fase 3 – Composición gráfica sobre elementos arquitectónicos de nuestro alrededor

A continuación voy a insertar un collage de fotos de ventanas típicas de mi pueblo (Yecla) que he ido haciendo estos meses. Además de las ventanas, podemos apreciar distintos estilos de rejas.